En este Día Internacional de la Mujer, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) renueva su compromiso con la promoción de la igualdad entre los géneros; la salud sexual y reproductiva y el ejercicio pleno de los derechos de las mujeres, especialmente de aquellas más vulnerables.
El ámbito de la salud no se escapa a la discriminación por género y se agudiza por la condición étnica y por el lugar de residencia de las mujeres. Aun existen amplias brechas para garantizar el pleno acceso de las mujeres rurales a la salud integral y en particular a la salud reproductiva.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Población, los mayores niveles de mortalidad materna se observan en las mujeres rurales e indígenas, y en aquellas con 35‐49 años de edad. En este grupo de mujeres, en 2009, se estimó que anualmente morían 62 por cada 100 mil nacidos vivos, razón bastante alejada del objetivo de 22 defunciones a ser alcanzado por Mexico en el 2015, cuando se cumple el plazo para lograr las metas del milenio. Las mujeres indígenas exhiben menores niveles de atención del parto institucional de 70% y muchas son atendidas por parteras, 25% según la ENADID 2009.
Una mujer indígena partera, participante del proyecto “Cuidando el cuerpo de la mujer, del niño y de la Madre Tierra” apoyado por el Fondo de Población en Chiapas mencionó sobre la mortalidad materna en su comunidad: “Me interesó entrar a las capacitaciones para que ya no hubiera más muertes de mujeres, cuando nacen bien los niños nos sentimos contentos, pero cuando se muere alguno nos ponemos tristes”.
Dado los costos que representan la creación de infraestructura médica y su mantenimiento, es necesario fortalecer las acciones de capacitación y formación de las parteras y reconocerlas como aliadas estratégicas en la reducción de la mortalidad materna en zonas rurales e indígenas. Otra estrategia efectiva para la reducción de la mortalidad materna es la promoción de la planificación familiar. Según la ENADID 2009, el 93% de mujeres rurales en edad fértil conoce al menos un método anticonceptivo, sin embargo sólo el 63% los usa.
Casi una de cada 4 mujeres indígenas tiene necesidad de usar anticonceptivos que no ha sido satisfecha, esta cifra es más del doble que la de las mujeres no indígenas, calculada en un 9%. La provisión, distribución y disponibilidad de insumos para la salud reproductiva es un requisito indispensable, y señalado en los ODM, para la reducción de la mortalidad materna, la reducción de las tasas de embarazos adolescentes, la prevención de infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH, y los abortos.
Como mencionara el Director Ejecutivo del UNFPA, el Dr. Babatunde Osotimehin, en su mensaje alusivo a éste día: “Cuando las mujeres puedan tomar decisiones libres y responsables en todas las esferas de su vida, incluidos el matrimonio, y el número y espaciamiento de sus hijos o hijas, podrán desarrollar plenamente su potencial y contribuir más al desarrollo de sus comunidades y naciones”. Este Día Internacional de la Mujer, el Fondo de Población convoca a la sociedad mexicana a tomar acciones para que entre las mujeres rurales e indígenas todo embarazo sea deseado, todo parto sea seguro y todas, mujeres y niñas, puedan acceder a una vida con iguales oportunidades y libre de violencia.