Llama el UNFPA a un cambio profundo para prevenir el
embarazo adolescente
Cada día, 20,000 niñas menores de 18 años dan a luz en
países en desarrollo.
Cada día mueren 200 niñas adolescentes por causas
asociadas al embarazo o el parto.
Los verdaderos desafíos son la pobreza, la desigualdad
de género, la discriminación, la falta de acceso a los servicios
y las opiniones negativas sobre las niñas y las mujeres.
En México, en el año 2012, ocurrieron 2.2 millones de nacimientos, el 17.6% de ellos fueron de
menores de 20 años de edad
Ciudad de México.‐ El 21 de noviembre del 2013, durante Presentación en México del Informe de la Población
Mundial 2013, Leonor Calderón, Representante del Fondo de Población de las Naciones para México (UNFPA),
Cuba y República Dominicana, dijo que el UNFPA recomienda abordar la maternidad en la niñez desde un
enfoque ecológico, en el cual se muestra que los embarazos en adolescentes no ocurren en el vacío, sino que
son consecuencia de un conjunto de factores que interactúan, como la pobreza generalizada, la aceptación del
matrimonio infantil por parte de las comunidades y la familia; así como por los esfuerzos insuficientes o
inadecuados para mantener a las niñas en la escuela.
En el informe se precisa que el embarazo y el parto son unas de las principales causas de muerte entre
adolescentes en países en desarrollo. Leonor Calderón mencionó
que la mayoría de las adolescentes que se embarazan antes de los
15 años tienen baja escolaridad, viven en situación de pobreza y en
zonas rurales, pertenecen a etnias o a grupos minoritarios, y por lo
tanto sus derechos se ven severamente amenazados o vulnerados,
La representante del UNFPA sugirió que en vez de concebir a la
niña como “el problema” y querer cambiar su comportamiento
como solución, los gobiernos, las comunidades, las familias y las
escuelas deben entender que los verdaderos desafíos son la
pobreza, la desigualdad de género, la discriminación, la falta de
acceso a los servicios y las opiniones negativas sobre las niñas y las
mujeres; asimismo, advirtió que la búsqueda de justicia social, el
desarrollo equitativo y la ampliación de los medios de acción de las niñas son el camino correcto.
La publicación hace un llamado para un cambio profundo en el enfoque y las intervenciones dirigidas a la
prevención del embarazo adolescente, orientado a la acumulación de capital humano, el empoderamiento
para la toma de decisiones y el acceso a oportunidades reales, a servicios amigables y educación integral de la
sexualidad.
La representante del UNFPA mencionó que en el caso de las adolescentes de menos de 18 años, y
particularmente las de menos de 15, el embarazo no es el resultado de
una decisión deliberada, sino de la ausencia de poder de decisión y de
circunstancias que están fuera del control de la niña y en numerosos
casos, son el resultado de violencia sexual o coerción.
El informe incluye recomendaciones concretas para disminuir el embarazo
en la niñez, tales garantizar lla permanencia de las niñas en la escuela,
acabar con los matrimonios infantiles y forzados, fortalecer el capital
humano de las niñas y sus habilidades para la toma de decisiones y
empoderarlas para defender sus derechos humanos básicos.
La Representante del UNFPA reiteró su compromiso para continuar apoyando al Gobierno de México y a las
organizaciones de la sociedad civil para prevenir y atender el problema de la maternidad en la niñez, para que
la maternidad no se convierta en el único destino para una niña o adolescente y para erradicar la violencia y la
coacción hacia esta población.
Por su parte, Susana Cerón Mireles, Directora General del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud
Reproductiva, mencionó que en el año 2012, en nuestro país ocurrieron 2.2 millones de nacimientos, el 17.6%
de ellos fueron de menores de 20 años de edad (388, 658 nacimientos), de los cuales, 10, 264 fueron de niñas
entre 10 y 14 años de edad, lo que representa el 2.6 por ciento de los nacimientos registrados en madres
adolescentes. Asimismo, informó que la incidencia de embarazo adolescente es más alta en las entidades de
Tabasco, Campeche, Guerrero, Morelos, Chiapas, Oaxaca, Veracruz y Michoacán, donde ocurren matrimonios
o uniones a edades tempranas.
Abraham Rojas Joyner, Director General de Programas de Población y Asuntos Internacionales de CONAPO,
puntualizó que la edad promedio de la primera relación sexual en la población femenina mexicana es a los 18
años. Además, indicó que 4 de cada 10 embarazos entre adolescentes no fue planeado.
En su intervención, María del Carmen Juárez Toledo, directora de desarrollo humano sustentable, del Instituto
Nacional de las Mujeres, reconoció que la maternidad temprana en México se ubica en un contexto
económico, social y cultural, donde destacan factores como la desigualdad de género, la pobreza y la falta de
oportunidades, así como el ser mujer indígena o rural.
Por último, Raffaela Schiavon Ermani, Secretaria Técnica del Comité Promotor para una Maternidad Segura,
propuso cero tolerancia a la violencia sexual en niñas y adolescentes, así como erradicación del matrimonio
infantil. Mencionó que 150 millones de niñas/adolescentes han sido víctimas de sexo forzado u otra forma de
violencia sexual alrededor del mundo.
El Informe del Estado de la Población Mundial 2013: Maternidad en la niñez: Enfrentar el reto de l embarazo en
adolescentes y materiales de la Conferencia, podrán ser consultados en el micrositio del evento ubicado en: